Sin planes este día. A la mañana temprano nos fuimos a la misa de 8AM en la catedral St. Stephen de Brisbane. Laaaaargo el evangelio de domingo de ramos!
Al salir de la misa fuimos al super a comprar nuestro almuerzo para más tarde, pero como no habíamos desayunado ya teníamos mucha hambre, así que nos fuimos a un parque en la ciudad que queda bajo el puente histórico e hicimos tipo picnic. Bueno estuvo…
Después de eso nos metimos en el auto y emprendimos viaje no me acuerdo a donde exactamente, pero a ningún lugar en particular. Mi papá quería ver como eran los campos y estancias de Australia así que nos fuimos en dirección oeste de Brisbane, es decir, al lado opuesto de la costa.
Llovia un poco de vez en cuando y estaba nublado también, pero de todos modos paseamos mucho. Visitamos un parque super lindo que tenía montañas de mil y tantos metros. Nos subimos con el auto y era una vegetación super linda y miles miles de vueltas en la ruta. Mi mamá se compró un vino en una vinería super artesanal y… no me acuerdo más que lo que hicimos! Pero finalmente vinimos al hotel tipo 4 de la tarde. Bastente cansaditos!
Dormimos siesta y al levantarnos decidimos ir a caminar por la costanera. Al final degeneramos la caminata y nos subimos al barquito o ferry que hay aca porque todavía no habíamos hecho ese paseo. Resulto ser un paseo super lindo por todo el río alrededor de la ciudad. Muy buena experiencia.
A la vuelta nos bajamos dos estaciones antes de nuestro hotel y caminamos. Finalmente a la noche cenamos en la pieza nomás los restos de nuestro picnic porque el buffet del hotel es impagable! Australia es un país caro realmente!
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