domingo, 23 de marzo de 2008

2 de 2!

100% de efectividad. Así empieza esta entrada en mi blog. Se acuerdan cuando se me perdió en el tranvía mi taquilla nuevita y escribí muy triste que no creía que la iba a encontrar? y finalmente la gente del tranvía tenía y me devolvio? Increíble no? Pero cierto... definitivamente Australia es un país honesto, y si hacía falta otra prueba de esto aca va otra historia. 
Hoy mis pas se fueron rumbo a Asunción en su maratónico viaje que incluye espectaculares paradas a lo largo de todo el globo terraqueo. Las paradas son: Melbourne-Auckland-San Francisco-Los Angeles-Chicago-Sao Paulo-Asunción. 
Volviendo al tema que incumbe a este artículo, jaja. Me fui con ellos hasta el aeropuerto esta mañana para ayudarles a hacer el check-in ya que era medio complicada su situación de embarque de valijas y de tickets. Al final tardamos como media hora en hacer el check-in pero no hubo mayores inconvenientes. 
Una hora antes que salga el vuelo por ahi me despedí de mis padres y me mandé a la ciudad en micrete. Ellos se fueron solitos a hacer su control de seguridad y demás rabanitos. 
Yo almorcé por ahí nomas, hice mi check-in en el apart-hotel donde me quedo estos días y traje mi equipaje al mismo. A la tarde me fui al Victoria Market a comprar unos souvenirs jeje. 
Más tarde recibí una llamada de mi papá! Cuando escuché su voz supuse que ya otra vez perdieron el vuelo o algo por el estilo como ya es de costumbre en sus viajes. Pero no, en realidad lo que perdió mi papá fue su iPhone. Sí, el amado iPhone... una lástima... Lo que sí que me dijo que probablemente perdió al hacer la entrada esa de seguridad donde te revisan todo y pasas los bolsos por la máquina. 
Y bue... llamé al aeropuerto esta noche al volver de la misa de Pascuas a la cual asistí en la catedral de Melbourne. Les conté de la situación de esta mañana y les describí el teléfono que se perdió. Y adivinen que? Tienen el iPhone!!! Que emoción no? De todos modos mi papá me dijo que ya se iba a comprar otro nomas.. jaja, que tarado. 
Me impresiona el porcentaje de efectividad en el encuentro de cosas perdidas en Australia. Realmente la gente es honesta, aunque también creo que tuvimos mucha suerte las dos veces! Quiten ustedes sus propias conclusiones, lo que sí que estoy muy feliz que el "aparato diabólico" haya aparecido!